TÍTULO
ORIGINAL: Good Vibrations
AÑO: 2012
DURACIÓN: 97 min.
PAÍS: Reino Unido
DIRECTOR: Lisa Barros D'Sa, Glenn Leyburn
GUIÓN: Colin Carberry, Glenn Patterson
MÚSICA: David Colmes, Keefus Green
FOTOGRAFÍA: Ivan Mccullough
REPARTO: Richard Dormer, Jodie Whittaker,
Liam Cunningham, Adrian Dunbar
PRODUCTORA: Coproducción Reino Unido-Irlanda;
Canderblinks Film and Music / Revolution Films / Northern Ireland Screen
PREMIOS:
2012: Festival de Sevilla: Sección oficial
largometrajes a concurso
[SEFF'12] Todo sueño
crece gracias a una oportunidad única e irrepetible. Y otras con mayor
esfuerzo, dedicación e ilusión. Esa es la imagen que Good vibrations muestra en
este nostálgico biopic de ¡una tienda de discos!. Si, una cosa tan inusual y
tan menudo como un establecimiento de discos musicales se ha convertido en una
gran películas para muchos gustos.
Una tienda que ha sufrido la ira del cartel de "cerrado" tantas veces que podría significar para cualquiera que no está hecho para el negocio. Pero al mismo tiempo ha sentido la alegría de estar "abierto" otras tantas con la que poder ilusionar a su modesto público. A día de hoy podemos disfrutar del aroma de su tienda en una pantalla o ir personalmente a abrir sus puertas por un tiempo posiblemente limitado.
Una tienda que ha sufrido la ira del cartel de "cerrado" tantas veces que podría significar para cualquiera que no está hecho para el negocio. Pero al mismo tiempo ha sentido la alegría de estar "abierto" otras tantas con la que poder ilusionar a su modesto público. A día de hoy podemos disfrutar del aroma de su tienda en una pantalla o ir personalmente a abrir sus puertas por un tiempo posiblemente limitado.
En un
momento histórico de guerras… Terri
Hooley (Richard Dormer), nuestro protagonista del ojo de cristal, risueño y
con una mentalidad multicolor decide que está en medio de una oportunidad única
para abrir su tienda de discos: Good vibrations. Un viaje a los años ’70 con mucho humor, referencias a la historia
y con la música punk como sujeción a las cuatro ruedas que nos
transportarán en este viaje en el tiempo.
Con
unos personajes que se acercan peligrosamente a la idea que podría egendrar
cualquier fumador de maría. Eso sí, en el punto justo para que la diversión no
llegue al absurdo absoluto. Richard Dormer en el papel protagonista es un gran
ejemplo. Ofrece diversión y dramatismo en un solo paquete y se reconoce la
comodidad. Solo físicamente transmite un buen rollo que pocos podrían hacer
solo sonriendo formando su calidez en diversión con lágrimas provocadas de las
carcajadas. Como interpretación ofrece una gran habilidad.
Aun
por las carcajadas se trata de un drama peligroso. En un contexto mísero en el que Terri abre una tienda destinada al
fracaso, pero que se desvive por ella. El mensaje usual de "persigue tus
sueños incluso después de sangrar" pero sin ser una bobada cargada de sentimentalismos. No es tanto su relación material como
sentimental. Un ejemplo de que algo que sale a la luz puede perder su
luminosidad, pero es nuestro trabajo de restablecer la intensidad hasta lo más
alto. Nunca dejar que otros nos la arrebaten o la suplanten.
Una historia agradable, simpatica en un contexto que no lo fue.
Pues no conocía esta película pero después de leer la reseña me ha interesado. Me la apunto.
ResponderEliminarSaludos!