El kárate dejó de usarse cuando se inventó la pólvora

Crítica: Boogie el Aceitoso

TÍTULO ORIGINAL: Boogie el Aceitoso

AÑO: 2009

DURACIÓN: 85 min.

PAÍS: Argentina

DIRECTOR: Gustavo Cova

GUIÓN: Marcelo Paez-Cubells (Cómic: Fontanarrosa)

MÚSICA: Diego Monk

PRODUCTORA: Illusion Studios

WEB OFICIAL: http://www.boogielapelicula.com/esp/index_esp.html

Un hombre criado y educado para matar. Un hombre que la guerra le ha tocado a base de mal el coco. Por lo general parece el típico veterano de guerra con mala leche. ¡Para nada!. Boogie el aceitoso es todos estos topicazos del cine americano y además de le une la faceta de un asesino a sueldo o por hobbie. Aunque la verdad es que parece un calco de Robert de Niro en Taxi Driver. De hecho la película tiene algún que otro guiño al cine americano como Sin City y a otros géneros como el western.

Comienza con una estupenda videocreación. Narra una etapa de guerra de escalofrío y de pisadas en la sangre. Preciosa (dentro de lo que cabe) y con la narración aguardentosa de Boggie con el que nos da a entender el carácter de este personaje antagónico y detestable.  Aburre tantas cabezas que se cruzan en el camino de las miles y miles de balas haciendo que estas exploten sin piedad. ¡Sangre por doquier! Parece que el director de la película se ría de cualquiera de las cintas de Quentin Tarantino. 

Por un principio se entiende el gatillo flojo del protagonista. Pero a cada tiro  el personaje deja de tener “encanto” y pasa a ser uno de los pilares de una película de animación odiosa y asquerosa. Un personaje que no evoluciona. Agradable en algunos momentos pero cansino al mismo tiempo.

Por la animación, no es muy llamativa, no se le sale a uno los ojos de la emoción pero con el tiempo te das cuenta que mantiene la esencia del cómic. Esto no quiere decir que sea fácil de acostumbrarse a los movimientos tan irreales. 

La trama no es precisamente un giro de tuerca deslumbrante. Aun así, con cierta dificultad se le podría dar un aprobado. Un sentido del humor cerrado y con poco encanto. Por lo general es imposible no afirmar que ofrecen lo que prometen pero con un extra que resulta excesivo, sobrepasando el límite de lo lógico. Una película dirigido a un público muy concreto con ganas de tiros.